¿Cómo llegar a la isla de Sal, en Cabo Verde?

Cabo Verde es un archipiélago situado en el océano Atlántico, a unos 570 km de la costa africana. La isla de Sal es uno de los destinos turísticos más populares del archipiélago. Si está pensando en planear un viaje a esta hermosa isla, aquí tiene información que puede ayudarle a llegar.

Opciones de vuelos a la isla de Sal

Islas de Cabo Verde

El primer paso para llegar a la isla de Sal es elegir el medio de transporte más adecuado. La mayoría de los visitantes llegan en avión, ya que la isla cuenta con un aeropuerto internacional, elAeropuerto Internacional Amílcar Cabral (SID).

Vuelos directos desde Europa

Varias compañías aéreas ofrecen vuelos directos entre Europa y el aeropuerto de Sal. Entre ellas figuran TAP Air Portugal, Royal Air Maroc, Brussels Airlines Y Aerolíneas de Cabo Verde. Las principales ciudades europeas servidas son Lisboa, Casablanca, Bruselas y París. La duración de los vuelos varía entre 4 y 7 horas dependiendo de la ciudad de salida.

Vuelos con escalas

Si no encuentra un vuelo directo desde su ciudad de salida, también puede es posible tomar vuelos con escala vía otras ciudades europeas o africanas. Por ejemplo, puede tomar un vuelo con escala en Lisboa (Portugal) o Dakar (Senegal). Esta opción puede resultar más económica, pero suele implicar una mayor duración del viaje.

Elegir las fechas de su estancia

Cuando planifique su viaje a la isla de Sal, es esencial que tenga en cuenta lo siguiente estaciones climáticas y turísticas que pueden influir en su experiencia. Cabo Verde tiene un clima tropical árido, con temperaturas medias de entre 20 y 30°C durante todo el año.

Estación seca y temporada alta turística

La estación seca suele ir de noviembre a junio, con temperaturas cálidas y pocas precipitaciones. Ésta es también la temporada turística alta, cuando los hoteles y otros servicios turísticos pueden ser más caros y estar menos disponibles.

Temporada de lluvias y temporada turística baja

La temporada de lluvias va de julio a octubre, con temperaturas algo más frescas y chubascos ocasionales. Durante este periodo, el alojamiento y los vuelos suelen ser más asequibles, pero algunas actividades turísticas pueden verse limitadas debido a las condiciones meteorológicas.

Formalidades de entrada en Cabo Verde

Para visitar la isla de Sal, los nacionales de muchos países necesitan un pasaporte válido y, a veces, un visado o una autorización electrónica de viaje (AVE) para entrar en Cabo Verde. Es importante comprobar los requisitos específicos para su nacionalidad antes de partir.

Visa o EASE

Los ciudadanos de la Unión Europea, el Reino Unido, Suiza y algunos otros países están exentos de la obligación de visado para estancias turísticas inferiores a 30 días. Sin embargo, deben obtener un Autorización electrónica de viaje (conocida como EASE) antes de su llegada. Este trámite se puede realizar en línea en la página oficial del Gobierno de Cabo Verde o a través de nuestra agencia, y cuesta alrededor de 1,5 millones de euros. 31 €.

Vacunas y salud

No hay vacunas obligatorias para viajar a Cabo Verde, pero algunas de las recomendadas son las de la hepatitis A y B, la fiebre tifoidea y la rabia. También es aconsejable contratar un seguro médico y de evacuación para cubrir cualquier gasto médico que se produzca en el lugar.

Moverse por la isla de Sal

Una vez que llegue a la isla de Sal, existen varias opciones de transporte para explorar las diversas atracciones turísticas y playas.

  • Taxis : Hay taxis disponibles en el aeropuerto y en las principales zonas turísticas. Los precios suelen ser asequibles, pero es aconsejable negociar la tarifa con antelación.
  • Alquiler de coches : Hay varias agencias de alquiler de coches en la isla, que ofrecen una amplia variedad de vehículos. El alquiler de coches puede ser una opción práctica para quienes deseen explorar la isla a su propio ritmo.
  • Transporte público : La isla de Sal cuenta con una red de minibuses llamados "aluguers" que conectan las principales ciudades y lugares de interés turístico. Estos vehículos son baratos, pero a menudo están abarrotados y son menos cómodos que los taxis o los coches de alquiler.